Próxima crisis financiera: ¿China?


La economía china presenta una serie de desequilibrios crecientes en un contexto de cambio de modelo de crecimiento. Las señales que se desprenden de sus indicadores de referencia apuntan hacia una crisis financiera cuyas repercusiones tendrían reflejo a escala global.

Hay analistas que ponen en tela de juicio las cifras «oficiales» de crecimiento ofrecidas por las instituciones públicas. Según City, el crecimiento real del PIB chino no se aleja mucho del 2% a/a, lo cual, para una economía que hace no tanto venía creciendo a tasas de dos dígitos, traccionando de forma importante de la economía mundial, es síntoma de lo complicado del momento por el que atraviesa.

Téngase en cuenta que desde la década de los 80 hasta finales de 2010, China ha pasado de contribuir con el 5% en 2008 al crecimiento global, hasta superar el 25% en 2015, según datos del FMI. Estamos por tanto ante un crecimiento explosivo, probablemente sin precedentes en la historia económica moderna y que pone de manifiesto el extraordinario proceso expansivo de la economía china, hasta adquirir un papel  protagonista de primer nivel en el orden mundial, superando a la otra gran potencia como es EEUU.

Según Ricahard Ramsey, Chief Economist Northern Ireland, la combinación de factores como el freno al crecimiento, junto a la desinflación, la caída en el crecimiento del comercio mundial y un entorno global de tipos de interés muy reducidos, con expectativas de seguir a niveles bajos durante mucho tiempo, crean las condiciones propias para una nueva crisis financiera con colapso del crédito y estrangulación de los circuitos de financiación de la economía productiva. Así queda de manifiesto en la presentación del referido autor que encabeza esta entrada.

Véase también: 5 reasons to worry about China